lunes, 14 de octubre de 2013

07: Pétalos de Luz!

Cosa increíble, a partir de esa tercera separación de cuerpos comencé a comprender lo que hablaban. Percibí por un hilo de la conversación que escuché entre ellos, que aquello era necesario para capacitarme, para recibir el mensaje que vendría enseguida. Un ser luminoso al frente mío comenzó a irradiar ondas de luz suaves, coloridas y perfumadas y de esas divulgaciones capté lo siguiente:

El Gran Mensaje
"Gloria al Creador Universal.
Que Su Luz y Su Amor estén en todas partes. (1)
Querido hermano, el tiempo de la Tierra se agota. Los corazones endurecidos parece que no aceptarán a tiempo la verdadera noción de Paz y Fraternidad necesarias para interrumpir el Proceso de la Transición de manera trágica y dolorosa. (2)
Ningún milagro se medita para llamar la atención de los Hermanos del Planeta Tierra.
Las simientes lanzadas a los corazones fueron consideradas suficientes. (3)
El proceso desencadenado está en marcha y parece no tener retroceso. El verdadero Amor que por ventura venga a brotar en los corazones será punto de referencia para el período de post-transición. (4) Todo ese trabajo preparado para traerlo a usted aquí y entregarle este mensaje es muy costoso.
"No se juzgue insignificante o poco digno de estar participando de este trabajo, que es indiscutiblemente importante desde el punto de vista sideral. Usted está disponible a través de la mediumnidad y a los ojos del Padre, aunque fuera sólo por usted, por un sólo ser humano, desenvolveríamos la misma tarea y en este caso, ustedes no estarían capacitados para entender que tan maravilloso sería eso a nuestro espíritus, aún más si fuera para toda la humanidad". (5)
La paralización por parte de las naciones en la producción de armas de cualquier tipo y calibre sería el primer paso en la adopción del sentimiento de paz dentro de los corazones de la Humanidad.
Esta es la idea que debe ser divulgada por toda la humanidad. (6)
Vaya en Paz.
Gloria a Dios por toda la Eternidad".
Observación: Jesús nos dijo un día: "Aquellos que tuvieran ojos para ver que vean y oídos para oir que escuchen".

Observaciones del Médium:
1. Esto fue emanado con una reverencia tan pura y al mismo tiempo tan grandiosa en relación al respeto y amor que sólo podría partir de quien estuviera o está con EL.
2. Referencia al Final de los Tiempos previsto por Juan Evangelista -Apocalipsis- confirmado por muchos otros y ampliamente estudiado por Ramatís en su obra "Mensajes del Astral".
3. Referencia a un nuevo Mesías o a la aparición de Seres evolucionados en sus naves y aún clara referencia al Evangelio de Jesús y de todos los filósofos y sabios que lo anticiparon.
4. Se refiere a la acción abusiva e irresponsable del hombre contra la naturaleza y saturación del aura del Planeta con residuos mentales acumulados por milenios.
5. Coloco este trecho entre comillas porque es como si fuera una respuesta personal dirigida por mí mismo, pues mentalmente cuestionaba el trabajo gigantesco de ellos por una humanidad que tiene todo en las manos y no consigue ser feliz, ni vivir en paz sólo porque no quiere y que los Seres luminosos sabiendo todo esto no se cansan en reafirma que a cualquier momento existe la oportunidad para la renovación espiritual.
6. Este punto me entristece por las pocas oportunidades que tengo de dar amplia divulgación del mensaje como Ellos desean.
Terminado el mensaje quedé atemorizado con la posibilidad de olvidarlo. Siento que lo esencial está ahí, de la manera como me fue pasado. Las ideas llegaban a mí como la sensación de una brisa suave y musical envolviendo mi ser y atravesando mi cuerpo. Fui traído de vuelta a la Isla de Pascua, sin tener tiempo de entender perfectamente lo ocurrido. Me dejaron en la Isla y de ahí fui conducido hacia el Centro donde estaba mi cuerpo físico en reunión con los otros compañeros del GER.

El 12 de Enero de 1987 nuevamente salí del Centro en dirección a la Isla de Pascua, en mi sexto viaje al lugar acompañado por Shama Hare. Allá estaba siendo esperado por un pequeño disco.
Entré, después de acomodarme en un sillón muy confortable y con un diseño ajustado para la anatomía del terráqueo. Partimos en dirección al Océano Pacífico y en pocos instantes estábamos sumergiéndonos.
Pasé entonces cerca de una maquinaria especial para limpieza del agua marina montada en la región de una corriente marina por los habitantes de ARMAT y que está en pleno funcionamiento.
Habían dentro de la nave otros tripulantes además de mí, que imagino fueran robots porque no me recibieron y no conseguía verlos de manera alguna, por eso dejé mi atención enfocada hacia los paisajes marinos impresionantes de belleza y de raras tonalidades de verde por todas partes.
No me incomodaba el hecho de no ver a los tripulantes del disco porque desde el instante en que recibí la orden de entrar ahí fui siendo guiando por una "Consciencia" poderosa y al mismo tiempo muy amiga, que me acompañaba tan presente que a pesar de ser invisible yo prescindía de su presencia física. Estaba a su voluntad sin temores.
Regresamos a la Isla de Pascua instantes después de que me revelaron que el pueblo que construyó las maquinarias marinas formó parte del cuerpo de la Fraternidad Blanca Universal y que nadie de ellos se encontraba más en el Planeta.
Me mostraron nuevamente el tanque de energía, generador del campo de fuerza que está enterrado bajo los siete moais y ví algo como un diamante pequeño en la punta de un conductor que partía del centro del tanque en dirección al centro de la Tierra. Este diamante tiene la forma de un pequeño triángulo y tiene la función de captar energía almacenada en el gran tanque.
Me dijeron aún que en la semana anterior, específicamente el 05 de enero de 1987, yo había viajado más allá de la Isla de Pascua dentro del duplo de un moá. Me informaron también que en este día no podría hacer otro viaje como el anterior por motivos de orden físico; el plazo de una semana era muy corto para someterme nuevamente a aquella operación y que el pueblo visitado en aquel día también pertenece a la Fraternidad Blanca Universal.
Entonces fui invadido por una sensación de que aquella era la última vez que regresaría a la Isla de Pascua, y no obstante, sentía que había tantas cosas por aclarar. Fue un pensamiento rápido, no tuve tiempo de cuestionar mentalmente con el guía del viaje porque comencé a sentir un sueño muy fuerte, irresistible, pero sabía que no dormiría, era como si quisieran romper mi resistencia para no cuestionar y prestar atención a lo que vendría.
La Isla de Pascua comenzó a emerger transformándose en la parte más alta de un gran continente unido a la Antártida. América del Sur había perdido su forma. La visión de este Nuevo Mundo era fascinante. La atmósfera era brillante de luz, el cielo de un azul nuevo, como si la naturaleza respirara salud.
Un número muy pequeño de sobrevivientes, disperso en pequeñas comunidades, vivía de perfecta cooperación, en una armonía inspirada en el más elevado sentimiento de Fraternidad. Esas eran las matrices de la Nueva Raza del futuro en nuestro Planeta Tierra. La somnolencia fue desapareciendo vagamente como si retornara de un sueño muy real y, en ese interin, fui traído de vuelta al Centro, con una sensación de haber cerrado un capítulo más sobre las revelaciones preciosas dadas por Hermanos Superiores.


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